Posibilitar el debate respecto a cómo las nuevas tecnologías disponibles permitirán a las compañías mineras atender sus retos operacionales, procurando elevar su competitividad, fue uno de los propósitos del VIII Seminario de Acercamiento Tecnológico para la Minería, “Hacia una minería autónoma”, 8SAT 2022.
En la instancia, Thierry de Saint Pierre, presidente de la Asociación Chilena de Empresas de Tecnologías de Información A.G (Acti), expuso que la pandemia impulsó la incorporación de nuevas tecnologías, disminuyendo el personal el terreno y fortaleciendo el trabajo a distancia.
Al respecto, indicó que la tecnología permite elevar la competitividad, mejorar la seguridad y extender la vida útil de los equipos; aunque esto conlleva una serie de desafíos en materia de soporte técnico y gestión organizacional.
Junto a ello, resaltó que la minería debe ser capaz de dar respuesta a la demanda de minerales que conlleva la transición energética, frente al cambio climático. Sólo en cobre, se requiere pasar de los 20 millones de toneladas, a unos 30 millones en el año 2030. Este desafío productivo deberá sustentarse en las nuevas tecnologías disponibles, expresó.
Ante dicho escenario, aseguró que la innovación y la tecnología son el motor del desarrollo minero para aumentar la producción de minerales en forma sustentable.
En esa línea, indicó que la innovación y la tecnología son claves para transformarnos y posicionar a Chile como un polo global de energías limpias y minería verde.
Además de abordar el reto de la digitalización post confinamiento: repensar el negocio de la empresa, su red de proveedores y colaboradores y cómo llegar y vender a sus clientes apalancados en nuevas tecnologías y en las plataformas digitales.
Y aseverar que la minería autónoma podría generar más de US$427 mil millones de valor para la industria y la sociedad en la década: 3-4% del ingreso en el período.
Minería conectada
El encuentro también contó con la participación del subsecretario de Comunicaciones, Claudio Araya, quien abordó los aportes de las tecnologías de conectividad en el nuevo escenario 5G, destacando que son habilitantes para la minería autónoma y el mantenimiento predictivo, sumado al hecho que la cadena logística se puede programar y optimizar con las tecnologías disponibles.
Además, se refirió los beneficios que genera la sensorización masiva: conlleva conocer qué está ocurriendo en la faena, las condiciones en la que se están llevando a cabo la actividad productiva.
Vinculado a esto último, indicó que la tecnología 5G permite disminuir la latencia, posibilitando una comunicación entre equipos casi en tiempo real, además de posibilidad en incrementar la cantidad de equipos que se pueden conectar, aspecto clave si es que se desea avanzar en materia de sensorización.
La autoridad explicó que las tecnologías están disponibles, siendo el desafío definir cómo serán utilizadas.
Un aspecto que también fue analizado por Renato Sepúlveda, presidente de SATMINING y Champion de Innovación y Tecnologías de Cooper 2022, quien aseguró que no hay una industria minera competitiva sin tecnologías.
El profesional destacó el aporte del desarrollo tecnológico a la competitividad sostenible, ante leyes de mineral decrecientes y mayores exigencias sociales y ambientales.
En esa línea, hizo hincapié en que es clave la innovación para el presente y futuro de la industria, mencionando por ejemplo que la tecnología colabora a afrontar los retos que presentan las cadenas de logística internacionales.
Además, comentó que las empresas más exitosas están enfocadas en fortalecer su trabajo remoto, además de la conectividad entre sus diversas operaciones; junto con manifestar que es necesario conversar en torno a la minería autónoma, con el fin de asimilar sus retos y oportunidades en los años venideros, en un escenario de mayor demanda de minerales para satisfacer la demanda proveniente de la movilidad eléctrica.
Por otra parte, Fernando Lucchini, presidente ejecutivo de la Corporación Alta Ley, se refirió a la importancia de no olvidar lo básico en el desarrollo de la estrategia tecnológica.
Detalló que la minería del futuro es tecnologizada, robotizada, sustentable, respondiendo a los nuevos desafíos del sector, en materia ambiental y sostenible. En esa línea, desde Alta Ley se busca apoyar el desarrollo de los proveedores, intensa en conocimiento, en I+D, que sea capaz exportar sus conocimientos a otros sectores.
A ello se suma el que es crítico contar con las capacidades necesarias en materia de ciberseguridad; además de avanzar en una minería verde, con énfasis en la gestión de sus activos y la eficiencia operacional.
En este nuevo escenario, es fundamental ver cómo vamos a medir estos avances, aseveró.