Para prevenir los riesgos vinculados con la inestabilidad de los vertederos mineros o la contaminación del suelo y el agua, y optimizar la eficiencia de la extracción de recursos, doce socios internacionales se han unido en el marco del recién adjudicado proyecto de investigación europeo Mosmin (Multiscale Observation Services for Mining-related deposits, “Servicios de observación multiescala para depósitos relacionados con la minería”).
De acuerdo a lo informado por el AMTC, Mosmin desarrollará investigación para proveer servicios integrales asociados al monitoreo geotécnico, geofísico y ambiental, así como la valorización de depósitos relacionados con la minería, basados en una combinación de EO (Earth Observation) y datos geofísicos in situ.
Al respecto, precisaron que los datos del satélite Copernicus EO se utilizarán para el seguimiento a gran escala de la deformación del suelo y la composición de la superficie. La información satelital se integrará con datos de alta resolución en tiempo real obtenidos por drones y sensores instalados en el sitio, aprovechando el poder del aprendizaje automático para la fusión y mejora de la resolución de datos de múltiples escalas y múltiples fuentes. Técnicas geofísicas novedosas y no invasivas, como la detección distribuida por fibra óptica y la tomografía de resistividad eléctrica, proporcionarán información del subsuelo para identificar el potencial de recursos y riesgos como la deformación interna y las filtraciones.
MOSMIN es coordinado por el Instituto Helmholtz de Tecnología de Recursos de Freiberg en el Centro Helmholtz de Dresden-Rossendorf (HZDR). La Agencia de la Unión Europea para el Programa Espacial (EUSPA) financia el proyecto con casi tres millones de euros, distribuidos en los tres años de duración del proyecto.
Sitios piloto para validación
En colaboración con empresas mineras nacionales e internacionales, se desarrollarán y probarán métodos de seguimiento basados en sensores remotos en múltiples sitios pilotos en Europa, América del Sur y África. Este enfoque permite realizar pruebas exhaustivas de los servicios en diferentes condiciones.
Técnicas geofísicas novedosas y no invasivas, como la detección acústica distribuida (DAS), que utiliza cables de fibra óptica como sensores, proporcionan información del subsuelo para evaluar el potencial de los recursos y riesgos como la deformación interna y las filtraciones.
La colaboración del AMTC se centrará precisamente en filtraciones y fugas de agua a través de los muros de los depósitos de relaves (piping), una de las fallas más difíciles de identificar con suficiente antelación en dichos sitios. El centro realizará investigación asociada al monitoreo geoeléctrico de depósitos de relaves, utilizando tomografía de resistividad eléctrica para determinar posibles infiltraciones en el muro del depósito de relaves.
La contribución del centro nacional está liderada por la Dra. Diana Comte y cuenta con la participación de las investigadoras Valentina Reyes y Daniela Calle, y los investigadores Leopoldo Córdova y Aarón Moya.
Otras entidades participantes son Nordic Strategy Partners AB de Suecia, el Centro Tecnológico de Comunicaciones de Cataluña, Codelco Chile (colaboración liderada por René Orellana, gerente corporativo de Aguas, Relaves y Proyectos Divisionales), Cupru Min (Rumania), GeoLinesia (España) y FQM Limited Trident (Zambia).
Una vez finalizado el proyecto, los servicios y productos desarrollados estarán disponibles para una amplia gama de usuarios y comercializados por tres pequeñas y medianas empresas. Esta es una parte integral de la financiación de EUSPA, que está orientada a la transferencia de tecnología.
En línea con lo anterior, el director de HIF, el profesor Jens Gutzmer, comentó que “los servicios y herramientas integradores de MOSMIN mejorarán la eficiencia y la confiabilidad del monitoreo, maximizarán la utilización de recursos y contribuirán a mitigar los riesgos ambientales y los impactos de la minería“.