Anglo American cumplió otro hito relevante para el avance tecnológico de la minería, incorporando a su operación el primer equipo Mud Master en Chile, que permite acelerar el proceso de compactación de los relaves de forma mecánica y mejorar así la eficiencia en el manejo del agua desde los relaves.
El equipo ya se encuentra operativo en el tranque de relaves Las Tórtolas y es parte de un proyecto piloto desarrollado en alianza con el Centro Nacional de Pilotaje para la Minería, el cual tendrá una duración aproximada de 12 meses y cubrirá un área de prueba inicial de 300 ha al interior de la cubeta del tranque que posee a la fecha una extensión superficial de 1000ha.
“En las operaciones mineras, el agua utilizada en el proceso queda finalmente contenida en los relaves o se pierde por la evaporación y gracias a este equipo podremos mejorar la eficiencia en el manejo del agua, incrementando los indicadores de recirculación e incrementar la compactación de los relaves en menor tiempo”, detalló Rodrigo Subiabre, vicepresidente de Tecnología e Innovación.
El ejecutivo agregó que este equipo fue fabricado exclusivamente para Anglo American por la empresa australiana Phibion, para aumentar las densidades de los relaves frescos depositados, optimizando así la recuperación de agua, gracias a la liberación de esta que se produce con el proceso de consolidación mecánica acelerada.
Minería más segura y sustentable
Cabe destacar que el uso de esta tecnología no altera la infraestructura de los tranques de relaves, mejorando la estabilidad, entregando seguridad operacional y dando la posibilidad de preparar el material depositado en el tranque para usos distintos a la actividad minera en un futuro.
“Este proyecto se suma a otras iniciativas, en donde buscamos re-imaginar la minería para hacerla más segura, más precisa y más sustentable, reduciendo de manera significativa y progresiva nuestra huella ambiental”, indicó Rodrigo Subiabre.
En una primera etapa, se evaluarán los resultados previamente definidos de recuperación de un 30% del agua liberada, para luego avanzar con el proyecto completando el año de prueba.