Dialogar en torno a los retos y oportunidades que presenta la transformación y cambio organizacional que se está desarrollando en el contexto de la Minería 4.0., fue uno de los objetivos de la conferencia que recientemente llevó a cabo la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), UDD Ventures y la Fundación Tecnológica de la gremial minera.
Uno de los expositores de seminario fue Francisco Bolaños, arquitecto para Internet de las Cosas y transformación Digital para Cisco Latinoamérica, quien expuso sobre el rol de los datos como materia prima esencial para la digitalización de los procesos.
Con el objetivo de conocer más sobre cómo los avances en estas áreas benefician a la productividad con el sector minero, MINERÍA CHILENA conversó con el especialista.
¿Cómo está viendo Cisco la transformación y cambio organizacional de la minería en Chile?
La minería chilena es un pilar económico importante para el país. Al tercer trimestre de 2021, representaba el 15% del PIB. Hoy, con conceptos como sustentabilidad, digitalización, economía circular, hidrógeno y eficiencia apuesta ser una industria cada vez más autónoma e inteligente.
Según el catastro “Inversión en la minería chilena – cartera de proyectos 2021-2030”, documento publicado por la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), la inversión minera en proyectos para el próximo decenio asciende a US$68.925 millones a través de 51 iniciativas.
Además, el país presentó una política nacional minera a 2050 que contempla cuatro pilares que apuntan principalmente a generar un modelo más sustentable para la minería del país. En materia medioambiental, la meta es lograr la carbono neutralidad a 2040, y dentro del ámbito social el objetivo es alcanzar la paridad de género en cargos directivos y un 35% en la industria en general al 2050.
La pandemia trajo cambios muy importantes, sobre todo de tecnologías que se consideraban años en su adopción hacia 2030: conectividad remota, trabajo híbrido, colaboración en entornos virtuales, realidad aumentada, inteligencia artificial, servicios de nube. No todas estas innovaciones eran parte de los planes de negocio y de inversión de la minería, sin embargo, todas las necesidades que trajo la pandemia para temas de continuidad operativa, colaboración entre equipos, resiliencia operacional, abaratar costos, aumentar ingresos y ahorros, obligó a las organizaciones a adoptar tecnologías en un periodo corto sin estar preparadas.
Por su parte, la minería chilena siempre ha sido pionera en la adopción de nuevas tecnologías en la región. Entonces, particularmente del sector minero, cuando hablamos de inversión, invariablemente se mira lo que hace Chile y se replica en Perú, Ecuador, Argentina, México y en varios otros lugares.
Chile va a la vanguardia en la adopción tecnológica. Los casos de éxito de allá, se replican en el resto en cuestión de meses.
Respecto al cambio organizacional, de un momento a otro estamos trabajando en un esquema híbrido y muchas empresas no estaban preparadas. No tenían los recursos tecnológicos necesarios ni la cultura para poder mandar a la gente a trabajar desde su casa y mantener los mismos niveles de productividad. Por otro lado, la colaboración que se requiere entre las áreas operativas y las tecnologías de la información es cada vez más estrecha. Por lo cual, esta parte en algunas organizaciones les está costando más que la adopción tecnológica misma.
Entonces, lo que estamos viendo es que las empresas que están adoptando más rápido la tecnología son las que están considerando como parte de su estrategia tanto a las tecnologías como a los procesos y a las personas. Y son las que rápidamente están haciendo la adopción sin tanto problema, recuperando más los niveles de crecimiento que el resto de las industrias.
¿Cuáles son los principales drivers de negocio que se deben considerar para avanzar en esta materia?
Los principales drivers desde el punto de vista de negocios se dividen en tres columnas: generación de nuevos ingresos, generación de ahorro y reducción de riesgos para la operación. Cualquier inversión, tecnología o iniciativa de cambio organizacional invariablemente estará ligado a uno de estos tres pilares.
Por otro lado, si hablamos desde el punto de vista organizacional, el tema de productividad, colaboración, resiliencia y continuidad operacional (que a su vez va ligado con generación de ingresos y ahorros) también son drives principales que están motivando la transformación organizacional de las empresas y de los procesos.
Entonces, recordando esta triada que comenté (tecnología, procesos y personas), las tecnologías que apalanquen ingresos, ahorros y reducción de riesgos van a ser los principales drives. Y por el lado de procesos y personas, todo lo que tenga que ver con eficiencia, optimización de la operación, continuidad operativa y reducción de costos son los que impulsarán estas iniciativas.
¿Qué perspectivas a futuro ve en la digitalización e incorporación de nuevas tecnologías en la minería chilena, pensando en la transformación y cambio organizacional?
Lo que vemos es que a partir de la adopción de nuevas tecnologías que se veían muy a futuro, se están creando nuevos casos de uso que son los que están sustentando el retorno al crecimiento de las empresas. De estas, son la IA aplicada a la analítica de datos para la toma de decisiones; realidad aumentada para reducir los tiempos de la capacitación del personal y los tiempos de reparación de fallas en las máquinas durante los procesos operativos; tecnologías inalámbricas que permiten nuevos modelos operativos basados en movilidad; Wifi 6 y 5G que están promoviendo y dando impulso a este tipo de iniciativas alrededor del monitoreo biométrico del personal, la ubicación y georeferenciación de máquinas, herramientas, vehículos y personas.
A nivel de arquitectura, todo el sector minero se sigue moviendo hacia el modelo de producción 4.0 que abarca diferentes tecnologías. Es importante comprender que es toda una arquitectura que abarca desde tecnologías para la adquisición de datos, para la analítica de datos a nivel de la misma infraestructura en la frontera de la red, preprocesamiento normalización y el envío de los datos correctos, a los equipos correctos en el momento preciso. También están las bases de datos, inteligencia cognitiva, realidad aumentada, ciberseguridad, sistema de visualización y observabilidad para identificar problemas dentro de las comunicaciones hasta los servicios de nube.
Entonces, vemos que las tecnologías y las inversiones se están haciendo alineadas a una arquitectura operativa, alineada con los drivers apuntado anteriormente. El modelo 4.0, apuntado hacia el 2030, lo vemos hoy.
¿Cuáles son los desafíos que advierten para profundizar este tipo de desarrollo?
Primero, en muchos países se ve a la tecnología como una inversión. Entonces, esto está cambiando. Cada vez son más las empresas que se dan cuenta de que la tecnología es un área de inversión para poder tener un impacto en ingresos, ahorro y riesgo, y no solamente un gasto operativo.
También tenemos una transición muy rápida a nivel tecnológico por lo que el factor humano se está viendo rebasado. Muchas personas que tenían amplia experiencia en el sector minero, pero que no tenían experiencia tecnológica se están jubilando. Por lo que el personal nuevo tiene mucho de algo o poco de lo otro. Es un reto mantener la experiencia y el conocimiento sobre las nuevas tecnologías para implementar nuevos casos de usos.
Por otra parte, está la colaboración entre áreas que antes no tenían que ver. Hoy tienen que colaborar de forma más estrecha. Vemos a futuro, áreas operativa y tecnología de comunicaciones sean una, trabajen en conjunto. Habilitando infraestructuras las capacidades digitales necesarias para poder cumplir con todas las necesidades de las empresas, a nivel de negocio y operativo. Es un desafío para poder estructurar una sola gestión tecnológica.