BASF y la Universidad Católica del Norte (UCN) firmaron un acuerdo de colaboración para promover en la Región de Antofagasta la investigación, el desarrollo y la innovación en la minería. El objetivo de la iniciativa es fortalecer la cooperación entre la academia, estudiantes y expertos de la industria.
Asimismo, la empresa europea instaló sus laboratorios de Separación Líquido-Sólidos (SLS) e Hidrometalurgia en las instalaciones del Departamento de Ingeniería Metalúrgica y Minas (DIMM) de esa casa de estudios superiores en Antofagasta.
La alianza busca fomentar y aumentar la cooperación entre académicos, estudiantes y los expertos de la compañía.
Asimismo, impulsar la captación de talento humano, atrayendo a las personas con real interés en participar en los laboratorios de la compañía alemana, que estarán en la universidad y bajo la dirección de la coordinadora de Desarrollo de Nuevos Negocios de Minería de BASF Chile, Leonor Ardiles.
“Con este convenio tenemos varios objetivos; uno de los principales es mantener el servicio posventa al cliente y apoyar en todo lo respectivo al soporte técnico, pero también buscar sinergias con la universidad en productos innovadores y atraer talento para la industria. Estoy convencida de que el trabajo en conjunto traerá beneficios para el rubro minero”, señaló Ardiles sobre el acuerdo de cooperación.
En tanto, la vicerrectora de Asuntos Económicos y Administrativos de la UCN, Ingrid Álvarez Arzic, indicó que “es muy relevante que la empresa se haya instalado al interior de nuestra Universidad, ya que demuestra el compromiso de generar actividades de investigación y desarrollo científico y tecnológico en conjunto. Estamos convencidos de que este tipo de acciones son y van en el sentido más correcto y dan cuenta de la voluntad que debe imperar: la colaboración”.
A su vez, el Dr. Óscar Benavente Poblete, académico del Departamento de Ingeniería Metalúrgica y Minas (DIMM) de la UCN, y uno de los principales impulsores de la iniciativa, resaltó el impacto de la alianza: “Es una relación de mutuo beneficio, ya que nos permite contactarnos con una empresa de primera línea a nivel global”.
Agregó que, de esta forma, una de las empresas químicas más grandes del mundo se instala en la Universidad Católica del Norte con dos áreas de gran importancia y enfocadas en la industria minera, como son la de separación sólido-líquido y la de reactivos de extracción por solvente. “Los beneficios son múltiples: Tendremos acceso a trabajos para estudiantes, prácticas profesionales, memorias, y participación en los laboratorios de BASF, los que estarán disponibles para docencia y para explicar los procesos que realizan”, acotó.
Proyecciones
Por su parte, el director del DIMM, Dr. Javier Arzúa Touriño, recalcó el impacto y alcance de la alianza con BASF. “Poder contar con el apoyo de BASF, desde el punto de vista de investigaciones conjuntas, posibilidades de memorias para nuestros estudiantes y prácticas profesionales, es muy relevante para el Departamento y la Universidad. Es una vinculación muy importante”, manifestó.
Sostuvo que el trabajo conjunto se extiende hacia temas de investigación y en avanzar en el desarrollo de nuevo conocimiento y mejora de los procesos metalúrgicos.
Uno de los grandes cambios de esta alianza es que la empresa alemana trasladó sus laboratorios a la Universidad. “No nos quisimos quedar en el papel de un acuerdo. Estamos tan comprometidos con el proyecto, que mudarnos a las instalaciones de la UCN refleja lo profundo que queremos innovar en la industria y lo comprometidos que estamos con crear y capacitar al talento de las próximas generaciones”, sostuvo Leonor Ardiles.
El gerente regional de BASF Mining Solutions para América del Sur, Jorge Davo, explicó lo relevante que es este tipo de iniciativas para fomentar la sostenibilidad de la industria minera: “Las cooperaciones son muy relevantes para poder crear productos innovadores que ayuden a la minería a ser más sostenible”.
En tanto, Felipe Schneider, gerente general de BASF en Chile, resaltó el trabajo desarrollado en conjunto con la universidad. “La academia hace un trabajo muy importante en investigación, y nosotros somos capaces de llevar esa investigación a la práctica, muchas veces agregando tecnología”.
Agregó que es una sinergia o relación virtuosa, en la cual la investigación se une a la tecnología y se lleva a la práctica. “Tener laboratorios en la universidad es fantástico, porque nos permite, de alguna forma, ir desarrollando talento; el talento que viene con la teoría y el laboratorio lo va llenando a una primera práctica para después llevarlo a la industria como tal. Se produce una cadena que es muy beneficiosa para la industria y también para la sociedad”, sostuvo el ejecutivo.
