Cerca de 90 trabas administrativas han identificado y priorizado, entre julio de 2022 y octubre de 2023, las Mesas Ejecutivas para la Productividad (MEP), mecanismo diseñado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y que ha sido adaptado a la realidad económica y normativa del país.
De acuerdo al informe, de ese total, un 51% pudieron ser resueltas gracias al trabajo colaborativo entre privados y públicos de sectores como: Construcción de Industrializados; Economía Circular; Industria Creativa; Manufactura; Turismo, Aeropuerto y Áreas Silvestres Protegidas; Alimentos y Exportación de Elaborados.
Al respecto, José Miguel Benavente, vicepresidente Ejecutivo de Corfo, destacó que “estos son espacios para establecer vínculos privado-público, en el que se juntan para resolver problemas que los privados traen a la mesa y que requieren coordinación de los organismos públicos; o resolver descoordinaciones e incluso llenar espacios de desconocimiento o faltas de información. Para ello se toman medidas para resolver trabas o problemas para los/as emprendedores/as. La evaluación que hemos hecho de estas mesas es muy buena, lo que ha sido avalado por organismos internacionales neutrales como lo es el BID”.
El ejecutivo añadió que “este tipo de herramientas sabemos que funciona bastante bien, porque se generan compromisos en el sector público con plazos y que se van resolviendo a medida que avanza el tiempo porque son instancias temporales”.
Foco en productores mineros
En ese contexto, la entidad de fomento activó dos nuevas MEP, orientadas a Economía Territorial y a la productividad de la Pequeña Minería.
En el caso de la segunda, la mesa convocó a representantes de 11 asociaciones, gremios y sindicatos del rubro junto a ocho servicios y representantes del Estado, entre los que destacan Corfo, BancoEstado, Sernageomi, Enami y el Ministerio de Minería, entre otros.
De acuerdo a lo manifestado por Corfo, el grupo de trabajo tendrá como objetivo diseñar soluciones para las principales trabas productivas que afectan al sector como divergencias y falta de definición única y consensuada sobre trámites aplicables a la pequeña minería, dificultades para acceder a instrumentos de fomento y financiamiento privado o la necesidad de ventanilla única para trámites de acceso a instrumentos de fomento para el sector, todos temas que han sido planteados durante el proceso de pre mesas que contempla este mecanismo.
En línea con lo anterior, Ximena Amenábar, de la Asociación Gremial Minera Andacollo y miembro de la MEP de Pequeña Minería, precisó que “para mejorar la productividad de nuestro sector es fundamental abordar estos desafíos de manera integral, lo que incluye mejorar la definición y su marco regulatorio, facilitar el acceso a financiamiento y tecnología, fomentar prácticas sostenibles y seguras, y mejorar la comercialización. Represento a una asociación como muchas otras que agrupan a la pequeña minería y con las cuales tenemos preocupaciones y anhelos similares. Por eso, estamos muy esperanzados en esta Mesa y queremos que pueda dar resultados concretos en el corto plazo”.