Tomando las debidas medidas de prevención y aforos permitidos por Covid-19, se realizó una ceremonia ecuménica en modalidad híbrida para conmemorar varios de estos hitos de la División Radomiro Tomic; es decir, con participación presencial reducida y mediante videoconferencia, para quienes no quisieron perderse este rito desde sus hogares o puestos de trabajo.
De acuerdo con la diversidad y la libertad de credo que se respetan en Radomiro Tomic, el vigésimo sexto aniversario de la División, el Mes de la Minería y el pasado Día del Minero y la Minera, fueron las razones para convocar a sus integrantes a ser partes de esta ceremonia ecuménica, que contó con la participación de Enrique Olivé, ex párroco de Chuquicamata y la Parroquia de El Salvador, y Jesús Aranda, director de la Fraternidad de Pastores Evangélicos de El Loa.
“Es muy importante tener una ceremonia de oración, que no es solamente pedir a Dios por nuestras necesidades, sino también darle gracias por el don de la vida, por la familia, por los(as) hijos(as), por todas las posibilidades que da el tener un trabajo digno. Es importante experimentar un momento de oración, silencio, canciones que puedan ayudar al espíritu. No todo lo importante es material, lo más importante en la vida, no se ve, es el espíritu y esto es lo que deseamos tener presente en un acto como el que hemos celebrado ahora”, destacó el sacerdote Enrique Olivé.
Por su parte, Jesús Aranda, elogió a todo el equipo de DRT: “felicitarles por el aniversario, por todo lo que estamos celebrando y felicitarles también por el esfuerzo que han puesto para superar todas las dificultades propias de esta pandemia. Han sido esforzados(as), cuidadosos(as), ha sido un tiempo difícil pero que han sabido llevar adelante y eso se agradece porque, como habitante de Calama, necesitamos que ustedes sean el ejemplo, el modelo a seguir”.
Familia minera
La ocasión fue propicia para la reflexión, permitiendo además conectar propósitos y renovar energías para llevar adelante los objetivos propios y laborales.
En ese sentido, Lindor Quiroga Bugueño, gerente general de la división, destacó la necesidad de retomar esta costumbre ya que “estas actividades las echábamos de menos, son muy necesarias, reconfortan el alma, el espíritu y nos dan mucha fe y esperanza para seguir perseverando en transformarnos en personas de bien y, de esa forma, lograr los grandes desafíos que tenemos. Esto es como un re impulso, un golpe de energía para terminar este año”.
“Recordamos nuestro aniversario, el Día del Minero y la Minera, que es muy importante en esta situación de pandemia, que la gente esté más unida que nunca, que todo sea un lazo de fraternidad y de esperanza”, manifestó Silverio Muñoz, tesorero del Sindicato de Trabajadores de Radomiro Tomic.