Para el 2025, Antofagasta Minerals planea invertir US$3.900 millones en proyectos de expansión y desarrollo.
Antofagasta Minerals anunció un incremento del 12% en su producción durante el último trimestre del 2024, alcanzando una cifra total de 664.000 toneladas de cobre fino para el año, un 1% más que en 2023. Este crecimiento fue impulsado por un aumento en la producción de Los Pelambres y de cátodos en Centinela, aunque contrarrestado por menores leyes en los sulfuros de esta última operación.
Iván Arriagada, Presidente Ejecutivo del Grupo, destacó los avances de los principales proyectos en Los Pelambres y Centinela, que se ejecutan dentro de los plazos y presupuestos establecidos. “Estos proyectos permitirán uno de los incrementos de producción más significativos en la industria, fortaleciendo nuestra competitividad y proporcionando una sólida base para un crecimiento a largo plazo”, señaló.
Inversiones y proyecciones para 2025
Para el 2025, Antofagasta Minerals planea invertir US$3.900 millones en proyectos de expansión y desarrollo, superando los US$2.700 millones invertidos el año pasado. Estas inversiones están dirigidas principalmente al Proyecto Nueva Centinela, que incluye la construcción de una segunda planta concentradora, y al Proyecto de Adaptación Operacional (PAO) en Los Pelambres, que contempla un nuevo concentraducto y la expansión de la planta desalinizadora en Los Vilos.
El Grupo proyecta producir entre 660.000 y 700.000 toneladas de cobre durante este año, con un costo neto de caja estimado entre US$1,45 y US$1,65 por libra.
Permisos para Minera Zaldívar
Un desafío clave es la obtención de permisos ambientales para extender las operaciones de Minera Zaldívar hasta 2051, evitando su cierre temporal previsto para mayo de este año. “Esto es crucial para la región de Antofagasta y para Chile. Actualmente, Zaldívar genera empleo para 4.000 familias y trabaja con más de 300 empresas proveedoras, muchas de ellas locales”, indicó Arriagada.
Resultados operativos y sostenibilidad
En 2024, el costo neto de caja del Grupo se mantuvo en US$1,64 por libra, reflejando un sólido desempeño operativo. La producción de oro descendió un 11%, alcanzando 186.900 onzas, mientras que la producción de molibdeno se mantuvo estable en 10.700 toneladas.
En términos de seguridad, Antofagasta Minerals alcanzó los mejores resultados de su historia, sin accidentes fatales y con una disminución en los indicadores clave. “Aunque estamos orgullosos de estos logros, debemos mantenernos alertas, especialmente con los proyectos en construcción”, agregó el ejecutivo.
El rol del cobre en la transición energética
Arriagada enfatizó el rol estratégico del cobre como un mineral clave para la transición energética y el crecimiento económico global. “Estamos bien posicionados para satisfacer la creciente demanda de cobre, esencial para la generación, transmisión y almacenamiento de energía eléctrica, así como para el desarrollo económico sostenible”, concluyó.
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