Rio2 informó que su subsidiaria chilena, Fenix Gold Limitada, ha obtenido la aprobación de su Estudio de Impacto Ambiental (EIA) para la construcción y operación de su Proyecto Fenix Gold, ubicado en la Región de Atacama.
Según detallaron desde RIO2, la decisión en Chile del Comité de Ministros de aprobar el EIA para el Proyecto Fenix Gold, ahora permite a la compañía avanzar en el proyecto a través de permisos legales, financiamiento y el reinicio de las actividades de construcción actualmente planificadas durante 2024.
Al respecto, Alex Black, presidente ejecutivo del Directorio, declaró que “finalmente, después de muchos meses de paciente espera, celebramos la decisión del Comité de Ministros de apoyar nuestro avance del Proyecto Fenix Gold. Hemos diseñado Fenix Gold como un ejemplo de lo mejor de la minería moderna, que no sólo aporta importantes inversiones y puestos de trabajo a la Región de Atacama, sino también una amplia protección del medio ambiente con un enfoque particular en la flora y fauna de la zona en la que operaremos. Agradezco sinceramente a nuestros accionistas por la paciencia y el apoyo que han mostrado durante los últimos 18 meses durante este difícil proceso, y me gustaría agradecer especialmente al estelar equipo de Rio2 y Fenix Gold por nunca renunciar a nuestra misión de reivindicar el trabajo realizado para la EIA de Fenix Gold”.
Proyecto Fenix Gold
Se trata de una de las iniciativas de lixiviación en pilas de óxido de oro sin desarrollar más grandes de las Américas, que alberga un recurso mineral medido e indicado de 4,8 millones de onzas de oro que la compañía considera que hará una contribución positiva a la Región de Atacama y Chile.
Desde la empresa empresa aseguraron que este proyecto es un ejemplo de minería aurífera moderna en la que se ha consultado y diseñado desde el principio una serie de consideraciones técnicas, ambientales y sociales.
Junto con ello, destacaron que representa una inversión significativa en el negocio de minería de oro en Chile por parte de una empresa minera junior, de aproximadamente US$235 millones de capital inicial y sostenido, y generará empleo para al menos 1.200 personas durante la fase de construcción y 550 personas durante la fase de operación de 17 años. La mina que se contempla en el proyecto será una operación de lixiviación en pilas de pasada, resaltando que no se requieren instalaciones de chancado o almacenamiento de relaves, lo que minimiza el impacto general y la huella del proyecto.
