En el proceso de recuperación post-pandemia, muchas empresas están pasando por dificultades, ya sea por la reducción en la demanda de sus productos o por problemas en la cadena de suministro para la producción. Adicionalmente, los precios de los combustibles han ido al alza producto de desajustes entre la oferta y la demanda a nivel internacional.
En este contexto, el costo energético representa una parte muy importante en los costos totales de los sectores productivos como la minería, la agricultura, el transporte o la acuicultura, expuso el director ejecutivo de la Asociación de Clientes Eléctricos No Regulados (Acenor A.G), Javier Bustos, en el Webinar «Cómo reducir el gasto energético en los sectores productivos», donde se planteó la importancia de no sólo observar el costo de la energía, sino también todos los cargos adicionales de potencia, transmisión y otros como parte del costo de suministro eléctrico.
El seminario, organizado por Acenor A.G. y la Cámara Chilena Norteamericana de Comercio (AmCham Chile), abordó la experiencia de tres representantes de clientes libres que han implementado distintas medidas para reducir sus gastos energéticos.
Rodrigo Subiabre, VP de Tecnología e Innovación de Anglo American, destacó que la compañía minera cambió sus contratos en 2019, lo que les permite tener un suministro 100% de energías renovables, reduciendo sus emisiones de carbono en un 70%. «Para el 30% restante de las emisiones estamos aplicando estrategias de eficiencia energética con la introducción de tecnologías de automatización y camiones autónomos que gastan menos combustible», explicó.
El ejecutivo detalló que también están trabajando para el gran desafío de reemplazar el diésel por hidrógeno verde. Concretamente construyen el primer camión a hidrógeno verde, el que proyectan que esté operando en Sudáfrica el primer semestre del próximo año. «Creemos que debería desarrollarse autogeneración para producir hidrógeno lo más cercano al lugar de consumo y también creemos que por los costos de transmisión, lo más probable es que el hidrógeno se transporte en tuberías. Si logramos producir energía eléctrica a 20 dólares el MW creemos que la ecuación se da y el hidrógeno va a ser producido en torno a 1,50 dólares».
Rodrigo Sepúlveda, consultor senior en Desarrollo Energético de Aceros AZA, agregó que la empresa acerera cuenta con una agenda de sostenibilidad en la que destaca la implementación de sistemas de gestión de energía con miras a lograr una mayor eficiencia energética, lo que les ha permitido reducciones de más de 1 millón de dólares. «El año pasado trabajamos en la implementación y certificación de ISO 50001 lo que ayudó a que todas las áreas de la compañía se alinearan en un proceso colectivo tras los objetivos que vienen desde la dirección de la compañía», agregó.
En tanto Felipe Flores, subgerente de Ingeniería y Energía de Walmart, explicó que se asesoraron con especialistas del sector energético y lograron firmar cuatro contratos que les permiten reducir en aproximadamente un 40% sus gastos. Hoy el 70% de la electricidad que utilizan proviene de fuentes renovables y al igual que AZA, implementan medidas para mejorar la eficiencia con sistemas de gestión.
«Hemos tenido buenas experiencias y otras que han quedado en el camino. Estamos explorando con el tema del hidrógeno verde, la electromovilidad y también estamos evaluando cómo lograr almacenamiento y paneles solares en cubierta para así tener un modelo circular», indicó.
La conversación estuvo moderada por Paula Estévez, gerenta general de AmCham Chile y concluyó con las palabras de Javier Bustos, director ejecutivo de Acenor A.G., quien enfatizó en la importancia de compartir experiencias entres clientes de distintos sectores productivos ya que «hay muchas ideas transversales que pueden ser de gran utilidad para mejorar el gasto energético y para avanzar en la carbono neutralidad que tenemos no solo como meta a nivel gubernamental sino que como meta a nivel país».